SOLO UN SORBO: GLÜCK RESTOBAR

Hay amores a primera vista que uno no puede olvidar jamás. Con Glück nos pasó eso, sabíamos que apenas nos dejáramos caer ahí, sí o sí teníamos que seguir volviendo. Y te das cuenta que en día domingo es un muy buen día para salir por unos shopitos, aunque también te das cuenta que la mayoría de los bares están cerrados. Ahí donde Glück Restobar, lugar de amigos, viene al rescate de las poncheras sedientas de shopitos y almuerzos aguatonados de día domingo.

Almuerzos de día Domingo

Antes que las chelas heladas, es importante hablar del porqué nos dejamos caer un domingo allá: ALMUERZOS AGUATONAOS. Y así es, en Glück sirven almuerzos para irse rodando pa’ la casa. El día que fuimos había en el menú costillar de cerdo, chupé de lapas, porotos con riendas y cancato de salmón; este último fue el escogido para esta nota. Apenas nos sentamos, pedimos el menú y nos llegó a la mesa un rico pebre para cucharear, y un shopito de hidromiel Melinium y otro de Czechvar Original Lager. Acto seguido una rica ensalada surtida junto con un gran plato de greda hirviendo gracias al aguatonado cancato de salmón que había dentro. Nos declaramos unos enamorados de las comidas en platos de greda, como que le otorga un sabor distinto y hace que la temperatura se mantenga mejor. ¿Qué opinas tú?.

Sobre el cancato, podemos decir que además de contundente, es delicioso. Con ingredientes que se sienten frescos y bien preparados. Cada cucharada era del disfrute de nuestros paladares y nuestras poncheras lo agradecen. Y ojo, que no trae longaniza para las poncheras más delicadas.

Variedad de Cervezas e Hidromiel

Contarles que además de los ricos almuerzos de domingo, ir a Gluck el finde significa beber buena cerveza. Tal como les contamos, la tarde de almuerzo la partimos con una ya clásica Czechvar original lager (5% y 22 IBU), la ‘tha rial’ Budweiser. Una cerveza de tipo Pilsner clásica de República Checa, con maltosidad predominante de toques cerealosos, frutales e incluso a miel; ligera y altamente bebible. Y también probamos la Hidromiel 5patas Melinium (6% y 18 IBU), con una agradable carbonatación en boca, dulzor equilibrado con el alcohol y de cuerpo medio-bajo. Muy rica. Ambos bebestibles son ideales para abrir los fuegos en cualquier tarde de shopitos.

Cuando se acabaron los primeros shop, pedimos el postre (el cual no se incluye en el menú). Una exquisita leche asada que maridó de forma extraordinaria con la nueva joyita de Cerveza Granizo: Heavy rumBA, una Wee Heavy fermentada y añejada en barricas de ron de 7.5% y 25 IBU. Para nuestro gusto, de lo mejor de Granizo en el último tiempo: maltosa y licorosa; con un dulzor atrapante que recuerda al toffe, al caramelo. Los toques de ron se integran de manera perfecta en esta exquisita cerveza. Absolutamente recomendada por nosotros.

Novedades en botellas

Para finalizar, probamos dos de las nuevas chelitas presentes en Gluck y que también recomendamos arduamente.
La primera de ellas es una West Coast Sooty ‘n’ Nutty, una Imperial Milk Stout de 7.9%. Esta cerveza es una deliciosa mezcla entre una imperial stout y una crema de avellanas con castañas: un postre líquido. Es de esas cervezas que cuando empiezas a beber, no quieres que se acabe. A pesar de su graduación, el alcohol apenas se siente, siempre primando los toques cremosos y lacteos, junto con la avellana y otros frutos secos. De cuerpo robusto y muy cremosa. ¡Pídala!

Y la segunda, y final. Fue la exclusiva Petrus Nitro Quad de 11.5%. ¡Una maravilla de cerveza! Aromas de frutas silvestres con toque tostado y de licor. Con un cuerpo robusto, por el nitrogenado. Manteniendo los clásicos toques de una quadrupel belga, a fruta madura y caramelo, con un suave y aterciopelado dejo de licor. No se sienten para nada sus casi 12% de alchohol. Servirla violentamente para explotar todo su nitrógeno. Una maravilla para finalizar una tarde de almuerzo en Glück.

Emociones finales.

Glück aparte de todas las maravillas contadas anteriormente, es un lugar donde uno puede compartir la amistad. Siempre atendido por sus propios dueños, ellos se acercan a las mesas para saber como estás pasándola. Se agradece también la decoración y los jarritos shoperos colgados, que dan un bonito ambiente. Tienen una buena carta de comidas y cervezas, incluso, puedes pedir tus propios blends y armar tu shopito a tu gusto, ¿qué mejor?.